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Si prefiere quedarse en Los jardines centenarios del Hotel o buscar la aventura, el Hotel can Garay es el lugar ideal. Con más de 3000m2; sus entrañables rincones, su huerto, los avellanos que lo rodean, los jardines del Hotel son un lugar idílico para el buen descanso sin que os falte de nada: disfrutar de la calma junto a un buen libro estirado en una tumbona, escribir o trabajar con Wifi, escuchar música. Acompañado del sonido del agua que cae encima de una antigua piedra de molino reconvertida en fuente.
Tenemos servicio de bar todo el día: aperitivos, ensaladas, carnes a la brasa, bocadillos, pasteles de la Sophie, copas de helados u naturalmente bebidas bajo las sombras de los tilos. Disponemos de una área de juego infantil. Si desea explorar nuestro maravilloso entorno, ofrecemos todo tipo de indicaciones de rutas, mapas, información turística y la opción de llevarse un picnic.
El núcleo antiguo del pueblo – Buscar las calles cargadas de historia, los lavaderos, (que actualmente quedan pocos en la Garrotxa). Luego seguir hasta la fuente del Angel, a pocos metros está la ermita del Ángel Custodio (del1539) y el bellísimo camino antiguo para ir a Sant Feliu. Si queréis alargar la excursión buscar a vuestra izquierda una señales amarillas seguirlas y entrareis en el bosque por un corriol. Veréis antiguos campos, bancales hasta llegar a la Iglesia de Sant Pere Sacosta del 1207, es uno de los núcleos más antiguos y remotos del valle. Los terremotos de 1427-1428 provocaron una gran mortandad y destrucción. A finales del siglo XIX aún se decía misa.
La vía verde – en dirección Olot, Sant Feliu de Pallerols se encuentra a 5 km, en dirección Girona, Amer está a 8km del hotel. Con BTT Olot está a 23 km. Al volver, bajar desde el coll d’en Bas hasta el hotel es como volar pero sin despegarse del suelo.
El Gorg de can Poeti – muy cerca de la Antigua estación del ferrocarril, a pocos minutos del Hotel can Garay. Es un desnivel escalonado de pozas que, como piscinas naturales, bajan hasta llegar a una balsa grande rodeada de una densa vegetación.
Los puentes pequeños – ideal para los niños. Se hallan detrás de la escuela Modernista; una joya del 1918.
El castillo de Hostoles – mencionado ya en 1002, y el castillo de Puig-Alder ambos muy importantes en las revueltas de las remenses del 1463-72. Los dos son un símbolo de la historia del valle y una privilegiada vigía del medio que nos rodea; desde las cumbres nevadas del Pirineo a la llanura de Girona. Abajo Puig-Alder se encuentra el volcán del Traiter.
La ruta del agua – la poza de la Plana, poza del Molino del Murris y la poza de Santa Margarita.
Iglesia de San Pedro Sacosta del 1207 es uno de los núcleos más antiguos y remotos del valle. Los terremotos de 1427-1428 provocaron una gran mortandad y destrucción. A finales del siglo XIX aún se decía misa. Tenemos que tomar el camino viejo para ir a S. Feliu, y desviarnos hacía la izquierda, siguiendo un sendero que nos llevará hasta la ermita, entre encinares y robledas.
El Roble Centenario, declarado monumental en Cataluña se encuentra dentro del bosque de Les Planes, delante del hotel. Entrar en este enorme y tupido bosque se cómo cruzar la frontera de la soledad de la Ciudad, a un mundo en el que todo se comunica contigo; las encinas, los robles, los colores que cambian. Caminar hasta el roble centenario de la Xuriguera es fácil. Seguir es más difícil pero si sigues caminando puedes llegar hasta el santuario del Far que está a más de 1.000m de altura. En días soleados verás un buen trozo de tu país a bajo tus pies.
Olot y la Fageda den Jordán a 20km
Besalú pueblo medieval a 40km
Girona su barrio antiguo y el call judío 32km
Costa Brava – acercarse a tocar el agua del mar y volver a la tranquilidad de la montaña 54km
Con el punto de inicio en el mismo jardín del hotel, existe una gran variedad de rutas y sendas, tanto para los amantes del ciclismo como del senderismo.